Yo sé escribir muy bien
las letras de fracaso.
Del que tengo
cuando intento
y no me dejan conseguir.
Del que tengo
cuando no sé hacer,
y cuando acierto a errar.
Del que tengo
cuando me encuentra la tarde
con los brazos cruzados.
Yo sé decir muy bien
las letras de fracaso
y ya aprendí a viajar
junto a ese hombre,
roto e imperfecto,
que se empeña en contestar
siempre por mi nombre.
Yo sé vivir así
de cualquier modo,
sin esperar
que el día me procure
grandes cosas,
y soñando cada día menos
y más pequeño.
Y yo sé disfrutar
y hasta volar a veces
aunque tenga que ser
pegado al suelo.
Y ser feliz,
como un hombre cualquiera.
Hola Jorge.
ResponderEliminarUn poema para identificarse con él. Así nos sentimos muchas veces sin saber donde está el fallo, sin saber porqué, pero eso forma parte del cuaderno que no tiene renglones y a veces... escribimos torcido, pero siempre sin querer, e intentando ser feliz, y haciendo felices a quien nos rodea.
Buen poema.
Un abrazo.
Aloe.
Jorge, amigo y poeta."El otro hombre" ya fué descubierto hace mucho por poetas como Juan Ramón Jiménez, Jorge Luis Borges y otros muchos. Ese desdoblamiento de la personalidad es interesante, pero recurrir a él es artificioso. Lo importante es afrontar lo que consideramos nuestro fracaso en una doble perspectiva,una la de luchar por vencerlo, no consintiendo que ese hombre roto actúe, otra, la de no darle importancia, corrigiendo continuamnete su acción. Eso nos llevará a un perfeccionamiento sistemático de nuestra acción y olvidaremos para siempre "al otro". Un cordial saludo.
ResponderEliminarQuerido amigo, sí que sabes escribirlo y describirlo...me ha conmovido éste poema.
ResponderEliminarGracias por tu visita y por dejarme tu huella.
Un abrazo con el cariño de la amistad.
_Charo Bustos Cruz_
El cuerpo, este enchape,
ResponderEliminaresta plastilina,
nos hace tangibles.
La fuerza que le da forma,
(esa que se ve a si misma
pues el alma describe al alma),
nace cristalina,
trae vocación de vitral o calidoscopio,
es transparente y se enturbia
y quiere aclararse.
Bolaños.
Jorge, por un momento he creído que este poema lo había escrito yo. Sí, ya sé que no lo he escrito, pero te aseguro que eso lo he pensado tantas veces que lo hago mío. Yo también he aprendido con el paso del tiempo a volar a ras del suelo y, quizás, he conseguido a mi manera, y como otro hombre cualquiera, llegar a ser feliz.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Jorge. Adoro tus versos, todos, todos. Y más estos:
ResponderEliminar" Y yo sé disfrutar
y hasta volar a veces
aunque tenga que ser
pegado al suelo.
Y ser feliz..."
Que te pintan de ese color único. El que vos sabés.
Saludos Amigo, muchos, muchos.
Si esas letras son de fracaso, no quiero imaginar lo escrito con éxito. Deslumbrante " y ya aprendí a viajar junto a ese hombre roto e imperfecto"... me fascinó. Un beso
ResponderEliminarMe encanto lo que has escrito, es muy profundo, tienes un hermoso blog, tendre que regrezar para leerte con mas tiempo!
ResponderEliminarY feliz NAVIDAD!
vivir; que no es poco.
ResponderEliminarA veces demasiado
Y yo se volar contigo, desde mi cuerpo roto, cuando leo las letras de un poeta, de alma grande.
ResponderEliminarAbrazos muchos
Amigo poeta Jorge:
ResponderEliminarHe llegado a ti a través de otro amigo poeta y quedo en tu rincón un ratito para disfrutar de tu hermoso trabajo.-
Recibe mi abrazopoeta amigo
Y yo, una mujer cualquiera, pegada al suelo, llego a saborear el cielo cuando encuentro un hombre cualquiera como vos.
ResponderEliminarTus letras sí que están hechas de vida.
Un abrazo,
Clara
Me conmueve la desnudez de este poema. Un saludo.
ResponderEliminarMagia! eso hacés con las letras Jorge, malabarismos líricos, impresionante juego de azar de las palabras que vos, con un toquecito de talento, se reacomodan poéticamente.
ResponderEliminarUn lujo leerte. Besísimos
Un hombre cualquiera... y un poeta. Bellas letras las que entregas al verso, amigo. Bello homenaje a la vida.
ResponderEliminarEn el canto humilde a la vida, ciertamente se encuentra la estela del hombre feliz. A lo que veo, poeta y sabio.
Un fuerte abrazo.